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Feria de artesanias de Trelew

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Como todos los años, a partir del 2 de mayo comenzará la Tradicional Feria de Artesanos de Semana Santa en la Plaza Independencia de la ciudad de Trelew. El evento es organizado por la Asociación Artesanos  Plaza Independencia y cuenta con el auspicio de la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Trelew. Entre los numerosos objetos y productos artesanales podrán encontrarse artesanías en madera, metales, macramé, astas y huesos pirograbados, tejidos, bordados, sahumerios, muñecos country y porcelana fría. El lunes 2 de mayo, la feria permanecerá abierta desde las 14 hasta las 22horas, mientras que desde el martes 3 al sábado 7, las puertas se abrirán a las 10 y la gente podrá visitar el lugar hasta las 22 horas. A través de la compra de alguno de los productos, se participará del sorteo de una canasta con artesanías y el tradicional huevo de Pascuas. Para realizar consultas, comunicarse al 280-154535924. Se presentará “Sentimientos de Trinchera II” Además, el mismo lunes a las 18.30 tendrá lugar en el Centro Cultural Municipal (9 de julio 655) la presentación de “Sentimientos de Trinchera II”, la palabra de un soldado raso, a cargo del excombatiente Juan Carlos Recheni. A diferencia de la primera publicación de Recheni, “Sentimientos de Trinchera, Soldado 650”, esta nueva obra literaria nos pone al autor como testigo de los hechos, pasando las vivencias personales a segundo plano. De este modo, a través de poemas y relatos hechos en base a testimonios de ex- combatientes e información recopilada en medios gráficos, la palabra de un ex soldado da fe de las injusticias, coimas y “repartijas” que sucedían en ese entonces. Recheni se fue a la guerra cuando tenía 18 años, lo reclutaron en el Regimiento de Infantería Nº 8 en Comodoro Rivadavia con destino a Bahía Zorro, a comienzos de los conflictos bélicos. “Fueron dos  meses donde estuve casi sin comer, con miedo constante y frío. Todo esto me sumergió en un estado cercano a la locura. Cuando volví con mi familia entré en un mutismo absoluto, que sólo con el paso del tiempo logré vencer”, aseguró el autor en oportunidad de una entrevista. Mucho podrán decir. Mucho  se podrá opinar al respecto. Pero lo cierto es, que sólo quien puso el cuerpo  y el alma en esto, es digno de ser escuchado. Juan Carlos, al igual que  muchos jóvenes soldados sufrieron, penaron, extrañaron, pero vivieron para contarlo. Otros, no tuvieron la misma suerte. Como el caso de Simón Antieco, compañero de carpa y amigo del autor de  “Sentimientos de Trinchera”, que murió calcinado.